martes, 25 de octubre de 2011

Aprende a amarme.


Enviléceme con la indiferencia de tu amor.

Tortúrame con una mirada desviada, y
destroza mi ego a plenitud de indiferencia.
Socava mi existencia enamorada con tus
labios... que jamás tocarán los míos.

Empuña el arma de tu belleza, y
mátame con mi propio deseo.

Has de mi lo que quieras, pero al menos
mírame. Contémplame como naturaleza
muerta; destrózame al andar.

Clava en mí una mirada afilada; fría
como un corazón descompuesto de sentir.

Tócame con aspereza; dirígeme tu más
desdeñosa caricia.

Húndeme en la más sombría tristeza, y luego
vete, para volver al anochecer y cerciorarte
si aún respiro.

De ser así, tortúrame de nuevo,
con esa habilidad innata tuya para
romperme en mil pedazos. Pero,
por lo que más quieras, aprende a amarme.

1 comentario:

  1. De ser así, tortúrame de nuevo,
    con esa habilidad innata tuya para
    romperme en mil pedazos...

    siempre miles, porque el amor es tan basto, que hasta en eso muestra su grandeza.

    Hermoso.

    ResponderEliminar